Los gigantes chinos de vehículos eléctricos Xpeng y su filial AeroHT están preparados para transformar el transporte urbano con su ambiciosa entrada en la industria de los coches voladores. AeroHT está cerca de lograr la certificación de aeronavegabilidad para su innovador automóvil volador, lo que marca un avance importante en la tecnología aérea urbana.
AeroHT, una subsidiaria de Xpeng, ha estado desarrollando su automóvil volador durante una década, y recientes pruebas de vuelo exitosas a baja altitud en el concurrido distrito comercial central de Guangzhou muestran su progreso. El director ejecutivo de la compañía, He Xiaopeng, subrayó el potencial transformador de los viajes aéreos a baja altitud durante su discurso en Auto China 2024, destacando su profundo impacto en la vida urbana diaria.
El próximo automóvil volador AeroHT, que comenzará a reservarse en el cuarto trimestre de este año, promete un vehículo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) de modo dual capaz de realizar una transición perfecta entre viajes terrestres y aéreos. Si bien las fechas exactas de lanzamiento y los detalles de precios aún no se han revelado, los expertos sugieren un rango de precios estimado en alrededor de 1 millón de yuanes (138.000 dólares), con planes para mayores reducciones de costos en proceso.
El alcance de Xpeng va más allá de los coches voladores, ya que su división de robótica se centra en la creación de robots para tareas domésticas e interacción humana. Este enfoque multifacético subraya el compromiso de Xpeng con la innovación en varios sectores, consolidando su posición como pionero en tecnologías de vanguardia.
En un contexto más amplio, empresas chinas como Xpeng y AeroHT están encabezando la comercialización de automóviles voladores a nivel mundial, aprovechando la incomparable experiencia de China en tecnologías de vehículos eléctricos. Con la Administración de Aviación Civil de China revisando la certificación de tipo para el vehículo eVTOL de AeroHT y Xpeng preparándose para pedidos anticipados, el escenario está listo para un cambio de paradigma en la movilidad urbana.