Samsung lanzó la Galaxy Tab A9+ Kids Edition en Indonesia a finales del año pasado con un exterior personalizado que la protege mejor de los daños externos.
Ahora, la compañía ha anunciado la disponibilidad de la Tab A9+ Kids Edition en los EE.UU. con un precio de 270 dólares para la configuración de 4 GB + 64 GB. Para ponerlo en contexto, la Tab A9+ estándar está disponible actualmente por 179 dólares para la misma configuración. Puedes comprar esta tableta en la tienda oficial de Samsung de los EE.UU. y en Bestbuy
La Kids Edition viene con una interfaz de usuario personalizada y tres colores diferentes en el exterior: azul, rojo y amarillo.
Está equipada con el chipset Snapdragon 695. Si bien el chipset es compatible con 5G y la Galaxy Tab A9+ estándar también ofrece conectividad 5G, la Kids Edition depende únicamente de WiFi.
Cuenta con una pantalla TFT LCD de 11″ con una resolución de 1920 x 1200 píxeles. Incorpora una cámara de 8 MP en la parte trasera y una de 5 MP en la delantera. Tiene unas dimensiones de 168,7 x 257,1 x 6,9 mm y pesa 480 g. En su interior hay una batería de 7040 mAh, que es la misma que la versión estándar. También admite la misma velocidad de carga de 15 W.
La aplicación Samsung Kids ofrece una serie de controles para los padres
Según la empresa, este nuevo producto está destinado a garantizar un entorno más seguro para los niños en esta era digital. “La Galaxy Tab A9+ Kids Edition está diseñada para proporcionar un espacio para que los niños utilicen la tecnología de forma segura, al mismo tiempo que les proporciona el espacio para aprender, crecer, crear, transmitir y explorar”, dijo Drew Blackard, vicepresidente de Gestión de productos móviles. También reveló que los padres pueden incluso crear perfiles para sus hijos y personalizar sus configuraciones.
El dispositivo viene precargado con la aplicación Samsung Kids, que permite a los padres crear protocolos de seguridad personalizados. Con esta función, los padres podrán establecer límites específicos de tiempo de uso de la pantalla, restringir el acceso a determinadas aplicaciones y supervisar las actividades en línea de sus hijos.