Llevan a la venta en el país unos pocos meses.
Ni PlayStation 4 ni Xbox One habrían calado entre los jugadores chinos, según los datos de ventas que tachan de «decepcionantes» los números después de los primeros meses de su lanzamiento, tras un largo periodo en el que estaban oficialmente prohibidas.
Según Games Industry, Niko Partners sugiere que entre las dos consolas domésticas alcanzarán a final de año las 550.000 unidades de manera combinada.
Xbox One se lanzó en septiembre y PlayStation 4 en marzo, y el Gobierno chino controla el tipo de juegos que se pueden distribuir. Nintendo habría abandonado sus planes de lanzar sus consolas.
Para Niko la única manera de conseguir subir las ventas está en rebajar el precio de las plataformas y que China relaje sus normas, permitiendo así la entrada de más superproducciones que, en su mayoría, incluyen escenas de violencia.
«Pese a que China tiene una cultura de juego online en PC, los chinos que tienen entre 26 y 35 años crecieron con Super Nintendo y están acostumbrados a jugar con un mando frente a la televisión, dice Lisa Cosmas Hanson de Niko. «Estos jugadores adoptarán las Smart TV y las consolas, y empezará la transformación del salón en una habitación de ocio».
Fuente: vandal