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ZTE murió, ¿Puede OnePlus o Xiaomi seguir el mismo camino?

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ZTE murió, ¿Puede OnePlus o Xiaomi seguir el mismo camino?
ZTE murió, ¿Puede OnePlus o Xiaomi seguir el mismo camino?
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ZTE murió, ¿Puede OnePlus o Xiaomi seguir el mismo camino?. ¿Por qué es esto posible, en esta época, que una compañía de telecomunicaciones china multimillonaria con miles de empleados se vea forzada a cerrar de la noche a la mañana?.

ZTE murió, ¿Puede OnePlus o Xiaomi seguir el mismo camino?

ZTE, la cuarta compañía de teléfonos inteligentes más grande que opera en los EE.UU. ha declarado que «dejará de realizar importantes actividades operativas», dejando efectivamente a sus socios sin otra opción que sacar sus productos de sus estanterías y buscar otras alternativas.

La raíz del problema

Todo esto viene a raíz de una decisión del Departamento de Comercio de los EE.UU. de imponer una prohibición de exportación de 7 años para que la empresa pueda hacer cualquier tipo de negocio con firmas estadounidenses en las que la transferencia de propiedad intelectual, electrónica o software sea involucrado.

Eso incluye los semiconductores y el software con licencia de diseño estadounidense, como Qualcomm Snapdragon y los conjuntos de chips de soporte, y el sistema operativo Android. Sin acceso a estos componentes, ZTE, una compañía de telecomunicaciones china multimillonaria con miles de empleados, tuvo que cerrar de la noche a la mañana.

¿POR QUÉ ES ESTO POSIBLE EN ESTOS TIEMPOS?

Aunque la industria mundial de la electrónica móvil es bastante grande, la realidad es que la cadena de suministro de propiedad intelectual que realmente se destina al diseño de estos dispositivos no es tan grande como creemos.

Sí, hay un volumen tremendo en la fabricación de tales artículos, y muchas empresas están involucradas en su fabricación, pero los derechos de licencia de las tecnologías centrales que se incluyen en el diseño de estos componentes pertenecen a un grupo de empresas de élite bastante pequeño.

Existe un monopolio Apple – Qualcomm

En la parte superior de la cadena alimentaria para teléfonos inteligentes está ARM Holdings. Que es una empresa con sede en el Reino Unido que ahora es propiedad de SoftBank Group. Una empresa japonesa que tiene una participación mayoritaria en Sprint, que, salvo cualquier obstrucción gubernamental, está destinada a su fusión con T-Mobile para convertirse en el segundo proveedor de telecomunicaciones móviles en los Estados Unidos.

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ARM en realidad no fabrica semiconductores; produce planos arquitectónicos fundamentales para las diferentes generaciones de núcleos de microprocesadores que compañías como Apple, Samsung y Qualcomm licencian para hacer sus propios diseños de chips.

En términos de lo que afecta a la industria de los teléfonos inteligentes, dos de ellos son de propiedad y administración estadounidense: Apple y Qualcomm.

Samsung está blindado

Se considera que Samsung, con sede en Corea del Sur, es el mayor licenciatario junto a Apple, y con sus chips Exynos puede construir semiconductores para cualquier otro fabricante de teléfonos inteligentes.

Pero, al igual que Apple, reserva sus diseños de semiconductores para sus propios productos globales, que, por diversas razones, no tienen un amplio uso en los EE.UU.

Samsung, al igual que TSMC, con sede en Taiwán, también tiene la capacidad de fabricar semiconductores en nombre de Qualcomm. Sin embargo, utiliza principalmente semiconductores basados ​​en Qualcomm en modelos de sus propios teléfonos inteligentes Galaxy vendidos en los Estados Unidos.

La versión estadounidense del Galaxy S9, por ejemplo, usa el Qualcomm Snapdragon 845.

Solo Qualcomm tiene el alcance para trabajar con la mayor cantidad de proveedores, debido a su cartera total de IP, que incluye no solo sus chips Snapdragon, sino también sus componentes de RF y Wi-Fi.

ZTE y su dependencia de Qualcommm

ZTE dependía en gran medida de toda la cartera de IP de Qualcomm. Sin acceso a esos componentes, se habría visto obligado a rediseñar cada uno de sus productos para todas sus unidades de negocio, que incluyen equipos de operador, ya que también era un gran consumidor de la tecnología CDMA de Qualcomm. Y eso en la practica es imposible de llevar a cabo.

AHORA QUE ZTE ESTÁ FUERA DEL MAPA, ¿QUIÉN ES EL PRÓXIMO EN CAER?

Huawei, que es una empresa mucho más grande que ZTE, está actualmente bajo investigación criminal, y es muy probable que sufra enormes multas y potencialmente las mismas restricciones de exportación que ZTE.

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Sin embargo, Huawei posee mucho más de la propiedad intelectual que se utiliza en sus productos. Al igual que Apple, Samsung y Qualcomm, es un licenciatario de arquitectura ARM. Por lo tanto, tiene sus propios semiconductores, y compite fuertemente con Qualcomm en el negocio de los operadores. Incluso se está asociando con AT&T para crear un estándar global 5G, por lo que tiene sus propios componentes.

Huawei está mejor blindado

Si Huawei sufre las mismas restricciones que ZTE, estaría mucho mejor preparado para enfrentar una amenaza existencial. Perdería el acceso a la versión comercial de Android, que ciertamente no es ideal.

Pero aparentemente está desarrollando su propio sistema operativo, lo que le permitiría a su propio mercado doméstico continuar consumiendo sus productos y, potencialmente, continuar sirviendo a grandes mercados de exportación como la U.E. y el Reino Unido.

Por supuesto, todo esto excluye la posibilidad de que ARM Holdings, bajo la presión internacional de los gobiernos de los Estados Unidos, el Reino Unido y Japón, no revoque la licencia de arquitectura de Huawei.

Hasta ahora, no se ha hablado realmente de eso, pero no lo pondría fuera de la posibilidad de que las crecientes tensiones entre EE.UU. y China puedan dar lugar a tales acciones.

¿OnePlus y Xiaomi?

Pero no todos están tan preparados como Huawei. Otros dos grandes proveedores chinos de teléfonos inteligentes también dependen en gran medida de los componentes de Qualcomm: OnePlus y Xiaomi.

OnePlus, que es parte de la familia de compañías BBK que incluye Oppo, la marca de teléfonos inteligentes más popular en China, está lista para ocupar el lugar de ZTE en los EE.UU. como N°4. Actualmente no tiene relaciones con operadores; hace negocios directamente con los usuarios finales, al menos por ahora.

Si logra mantenerse fuera del radar, es probable que OnePlus se convierta en el fabricante de teléfonos de exhibición de Qualcomm en China. Su teléfono OnePlus 6, que se lanzará ahora en mayo, utiliza el poderoso Snapdragon 845 de Qualcomm, y ha sido muy esperado tanto por la prensa tecnológica como por los entusiastas de los teléfonos inteligentes.

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Xiaomi aún no se ha lanzado con un operador en los EE.UU., y ahora, probablemente desconfíe de cualquier inversión adicional bajo la actual atmósfera anti-chino alli. De todas maneras Xiaomi tiene un cierto blindaje por la diversificación en sus productos, ya que no solo fabrica teléfonos inteligentes (aunque son los teléfonos por el momento su principal ingreso).

¿CUÁL ES EL PROBABLE RESULTADO DE ESTA SACUDIDA?

El cierre de ZTE va a pesar mucho sobre las corporaciones chinas y seguramente las forzará a desarrollar no solo la fabricación doméstica de semiconductores (para competir con TSMC y Samsung), sino también sus propios diseños de chips nativos y arquitecturas de chips potenciales que son no vinculado a la propiedad intelectual propiedad de corporaciones extranjeras.

Empresas como Huawei, con su serie de chips Kirin y MediaTek, harán negocios de gangbusters a nivel nacional y con otros socios chinos que buscan alternativas de semiconductores a sus contrapartes estadounidenses.

La solución a este gran problema

Ya hay una discusión seria sobre un fondo de $47 mil millones que el gobierno chino está a punto de finalizar, lo que podría impulsar los diseños de semiconductores chinos nativos, posiblemente incluso las arquitecturas nativas.

Las arquitecturas de código abierto como RISC-V pueden ver un considerable interés de compañías como Huawei y MediaTek.

La independencia tecnológica

A largo plazo, esta independencia tecnológica es buena para China y las empresas chinas, pero aísla a las empresas estadounidenses del mercado quizás el más grande del mundo.

Con suerte, ZTE fue el único ejemplo que el Departamento de Comercio quería hacer, y no veremos más consecuencias. Pero si no, prepárese para ver una considerable eliminación de los productos y fabricantes chinos de productos electrónicos de los mercados de exportación estadounidenses y de otros grandes mercados.

¿ZTE es solo el comienzo de un gran sacrificio de productos fabricados en China del mercado estadounidense? Vamos comenten!.

Origen (inglés)

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